Nací en el año 1979 en Dombovár, terminando mis estudios en Pécs, donde resido también en la actualidad. Soy un local patriota. Entré al mundo de la fotografía relativamente tarde, en 2012, aunque siempre tenía interés hacia ese género. Tanto mi padre como mi abuelo fueron entusiastas fotógrafos aficionados, de ahí viene mi interés.
Al comenzar a hacer fotos pronto tuve de darme cuenta que deseaba crear imágenes inéditas, las que no hace nadie o relativamente pocos. Había querido crear – y lo sigo queriendo hasta el día de hoy – una identidad propia, un sello propio. No me gustaba plagiar, copiar.
Yo también comencé fotografiar la naturaleza y edificios, pero en ellas no encontré aquello que buscaba, que estuviera cercano a mi, que fuera yo. Llegué así al mundo monocromo y a la fotografía gastronómica. Intento mostrar a través de mis imágenes mi propio estilo, mi propio ser. En ello me ayudado mucho László Balassa, por lo cual le estoy agradecido hasta el día de hoy. Él me ayudó salir de mi zona de confort y abrir mis ojos. Esta es la concepción la que quisiera continuar, aunque sea un poco –o no poco– rebelde, con creaciones que a veces hacen triza de las reglas grabadas sobre piedra. Ese soy Yo.